La tómbola de Morena

En la Grecia clásica las candidaturas a cargos de elección se decidían por sorteo, tal procedimiento era posible porque quienes votaban no eran muchos y se seleccionaba a los mejores para ser elegidos. Ese sistema no era muy del agrado de quienes se oponían someter a la suerte la elección de quienes ocuparían cargos bajo cuyo desempeño estaba el destino social, pero ha trascendido como un ejemplo de democracia y así se formó un paradigma. Lo implementan en Morena como ejemplo de cambio democrático pero es solo simulación pues no Cuitláhuac, ni Ahued, ni Rocío Nahle, ni Miriam Ferraez, ni muchos “elegidos” más han sido postulados por el método de sorteo.